La factoría Disney ha apostado en los últimos años por personajes femeninos fuertes y valientes que no necesitan que ningún príncipe encantador vaya a rescatarlas porque saben apañárselas solitas. Basta con ver el flamante estreno de la compañía americana, ‘Star Wars: Los últimos jedi’, en el que Rey, una mujer de armas tomar, encabeza la lucha contra el lado oscuro.
No obstante, esto no solo ocurre en la reciente entrega de la saga galáctica. De hecho, esta tendencia también se observa en las cintas de dibujos animados de Disney: las damiselas en apuros han sido sustituidas por guerreras como Mérida (‘Brave’) o aventureras como Vaiana. Sin embargo, aunque parezca que llevar a la gran pantalla a princesas luchadoras es algo reciente, lo cierto es que Disney ya lo hizo en sus inicios: su primera heroína fue una ‘cowgirl’ de carne y hueso llamada Alicia.
La primera de todas
De hecho, mucho antes de que Blancanieves mordiera la manzana en 1937, e incluso antes de que Disney rozara siquiera la fama, él y su primer estudio cinematográfico, conocido como Laugh-O-Gram, rodaron en 1923 un corto de diez minutos de duración que supone el inicio de su historia. La cinta cuenta cómo la niña, después de visitar los mismos estudios de animación que realizaban la película, sueña que se mete en un mundo mágico, conoce a numerosos personajes animados e incluso es perseguida por unos leones que se escapan de su jaula.
Así, ni príncipe, ni zapatitos de cristal, ni corona. Alicia, con un estilo a medio camino entre Shirley Temple y una vaquera del lejano Oeste, es muy diferente a las princesas Disney que le sucedieron. Siempre ataviada con unas botas tejanas, Alicia es una niña bromista, curiosa e intrépida que vive aventuras acompañada del gato Julius. Julius puede considerarse el primer personaje animado recurrente de Disney; y tanto en la actitud como en la forma mágica en que usaba su cuerpo y otros objetos, se inspiró en otro popular gato animado de la época, Félix.
Lo más curioso es que, si bien la muchacha estaba interpretada por una actriz real (por Virgina Davis, concretamente), el universo en el que se desarrolla la trama, así como su mascota y la mayor parte de personajes, son dibujos. Y aún hay más: el ‘film’ es mudo y está en blanco y negro, claro. ¿El resultado? Algo así como si metemos a una princesa de carne y hueso en las primeras películas del insigne Mickey Mouse.
De la película a una serie de cortos
Todos recordamos los mejores momentos de la películas Disney con un cariño especial y reconocemos a cada personaje de inmediato: la muerte de Mufasa, o ‘Hay un amigo en mi’ son momentos imborrables para varias generaciones. Entonces, ¿por qué no hemos sabido de esta princesa vaquera hasta ahora? El motivo es que poco después de producir la película los estudios se declararon en bancarrota y tuvieron que cerrar, por lo que el corto nunca llegó a estrenarse.
Es más, ante el fracaso de su compañía, el señor Disney hizo las maletas y puso rumbo a Hollywood para tratar de hacerse un hueco en la industria cinematográfica. Como todos sabemos, terminó consiguiéndolo pero, antes de labrar su nombre en el paseo de las estrellas, vivió otras muchas decepciones.
Y es que el productor se mudó a Los Ángeles para intentar hacer carrera en el cine convencional. Sin embargo, al no lograrlo, volvió al mundo de la animación y con el respaldo de la distribuidora neoyorquina Margaret J. Winkler siguió produciendo cortos de dibujos sobre Alicia hasta 1927. Estos tenían argumentos muy sencillos: la niña va al mar por primera vez, explora el mundo con su amigo minino, baila, canta o conoce gente, pero siempre con una nota de humor.
Estas cintas no solo relanzaron la carrera del padre de Mickey Mouse, sino que sentaron las bases de los cuentos de hadas que haría más tarde. No en vano, en la serie protagonizada por la niña ya se pueden distinguir el toque personal del director y algunos de los rasgos que le catapultaron a la fama, como la creación de personajes entrañables, animales con comportamientos muy humanos o atmósferas mágicas. Eso sí, también se muestra a una chica trotamundos, comprometida con las causas justas e independiente de cualquier personaje masculino, características que poco tienen que ver con las princesas de sus primeras superproducciones.
Por otra parte, el personaje no es ajeno del todo al universo Disney. De hecho, oír el nombre de Alicia y el de Walt Disney en la misma frase nos transporta a otro cuento de conejos con relojes, teteros chiflados y reinas de crueles corazones. Y es que esta vaquera y la Alicia de Lewis Carroll no solo tienen el nombre de pila en común: el mundo del sombrerero loco imaginado por Carrol pudo haber inspirado la película de animación protagonizada por la ‘cow girl’. Prueba de ello es que el primer corto se llamó ‘Alicia en el país de las maravillas’, aunque el resto de la serie, que empezó en 1924 con la cinta ‘Un día de Alicia en el mar’ y terminó con ‘Alicia en la Gran Liga’ en 1927, recibió el nombre de ‘Las comedias de Alicia’.
Varias fueron las actrices que dieron vida a esta Alicia de cuento: Margie Gay, Dawn Evelyn Paris y Lois Hardwick hicieron de vaqueras después de aquel primer papel protagonista de Virginia Davis, que empezó a interpretarlo con solo 6 años. En cualquier caso, representaron el papel de una princesa sin precedentes que, de hecho, tardaría en volver a las historias de Disney: una princesa real como la vida misma, aventurera e independiente. Esta Alicia fue la precursora de todas las que hoy habitan en el séptimo arte.
Información de Smithsonian.com y Wikipedia. Imágenes de Youtube, y Disney.
Por si te ha sabido a poco más sobre Disney y cine en:
–Convertir fotos en una experiencia interactiva
–Una galaxia de récord: las marcas que ha batido Star Wars.
–’The Walking Dead’, ‘Star Wars’… La cultura pop invade la realidad aumentada.
The post Alicia, la ‘cowgirl’ rebelde: la primera princesa Disney fue de carne y hueso appeared first on Cooking Ideas.